SCEPTIC, Pathetic Being (2001)

Artista: SCEPTIC

Álbum: PATHETIC BEING

Estilo: Technical Death Metal

Nota: 9,5/10

 

Segundo asalto para los polacos Sceptic, la dicha de “segundas partes nunca fueron buenas”, la podemos aplicar al cine y a las relaciones de pareja, pero en el metal la cosa no funciona así. El segundo disco es el que te consagra, o te hunde, no hay medias tintas. Y Sceptic pasan la prueba de fuego con sobresaliente.

Dos años han pasado desde su prometedor debut “Blind Existence”, un excelente disco de Death Metal Técnico, plagado de reminiscencias de los maestros Death. Pocas sorpresas para este segundo larga durada, mismo estilo y mismas influencias, pero mejor producción y mayor madurez en la composición. 

Gracias al buen resultado cosechado con su anterior trabajo, consiguen fichar por una buena discográfica Empire Records. Hay un poquito más de dinero y eso se nota, ahora la producción es excelente, cosa siempre importante pero más aún si cabe dentro de su estilo, todos los instrumentos lucen por si solos, en un todo homogéneo. Parece que la cosa va muy en serio, e incluso se atreven a grabar un vídeo del tema que da nombre al disco (sencillo pero algo es algo).

Al mando sigue el virtuoso guitarrista Jacked Hiro, aunque se dan un par de cambios en la formación para este disco, batería y cantante nuevos. Curioso lo de este último pues, por problemas de última hora, el que canta en el disco no es el mismo tipo que sale en los créditos, si no otro cantante que tuvo que grabar in extremis las voces, para salvarles el culo. El menda cumple, pero justito, tampoco nos preocupa demasiado pues en Sceptic, lo más importante es deleitarse con la calidad técnica que desbordan todos sus miembros, tocando sus respectivos instrumentos.

El disco arranca con una sencilla intro acústica, que nos prepara el camino para el primer leñazo, “Ancient Portal” es un corte completísimo, donde los diversos riffs van cayendo, uno a uno, como pesados martillazos, sin piedad alguna. Este primer tema ya nos deja claro por dónde van a ir los tiros, incesantes cambios de ritmo, mucha tralla, cuidadas melodías y exquisita técnica.

“Pathetic Being” entra con unas sirenas de alarma, acompañadas por unos prodigiosos redobles de batería, más candela, y en breve aparece el solo que es puro veneno, se lo reparten a partes iguales los dos guitarristas, a cual mejor. El vídeo del tema es muy interesante, pues en él se puede observar perfectamente, la gran calidad técnica de los guitarristas y el bajista, (del batería pasan olímpicamente).

Seguimos con “Only Lies” de lo mejorcito del disco, contiene un poderoso riff súper adictivo, que los polacos, conscientes de ello, no paran de repetir durante todo el tema. La verdad es que poco importa, pues podríamos estar escuchando un riff tan espeluznante durante horas. Ending con guitarras acústicas, técnica que se ha convertido con el paso de los discos, en marca de la casa.

“Ancestor of All Powers” es un tema engañoso, comienza normalita, pero cuando nos acercamos a los dos minutos de tema, nos arrean un patadón en la boca con un rapidísimo riff y un solo de antología, combinando neoclásico con progresivo. Técnica usada en más de una ocasión por cracks de las seis cuerdas como; Alexi Laiho, John Petrucci, o Jeff Loomis, por citar algunos. Y que por muy repetido o visto que esté, siempre nos deja con la boca abierta, nadie escapa al alucine de un solo de este calibre, efectividad asegurada.

Pasamos a “Incapable Rulers” donde toca brillar ahora a la sección rítmica, con un bajo extra metálico y un batería, tremendos ambos. “Lost Identity” se perfila como un tema más directo, no en vano es el tema más corto del disco, inicio y final muy “thrashicos”, los tíos no solo derrochan técnica por doquier, sino que también tienen su mala ostia.

Dejamos atrás la progresiva “Artic Crypt”, para centrarnos en la instrumental de rigor. Si con el tema “Outworld” de su anterior “Blind Existence”, ya se le puso dura a más de uno, con “Particles of Time” el orgasmo está asegurado. Una pieza magistralmente compuesta por la banda al completo, y ejecutada a la perfección. Quien dijo que técnica y sentimientos no eran complementarios. Pieza magna, de las que llegan a lo más profundo del alma, de las que no te cansas de escuchar.

Cerramos con “Children Eyes”, otra maravilla técnica donde el tufillo a Death lo invade todo, las escalas de bajo a lo “Human” son fácilmente identificables, un poquito de “homenaje subliminal” a los de Florida por llamarlo de alguna manera. No en vano siguen siendo su patrón a seguir.

Sceptic consiguen su objetivo con creces, mejoran su ya buenísimo primer lanzamiento, con una joyita que pasó igual de desapercibida que su carrera hasta el momento. De poco les sirvió su particular “Symbolic” en su discografía, pero quien dijo que el metal era justo.

Pues un par de temitas para disfrutar:

 

                                                                 

Formación:

Jacked Hiro: Guitars

Pawel Kolasa: Bass

Maciek Zieba: Drums

Michal Senajko: Vocals

Czesliek Semla: Guitars

Temas:

 

1.	Intro
2.	Ancient Portal
3.	Pathetic Being
4.	Only Lies
5.	Ancestor of All Powers
6.	Incapable Rulers
7.	Lost Identity
8.	Arctic Crypt (Nocturnus cover)
9.	Particles of Time
10.	Children's Eyes

 

                                                              

PARADOX, Tales of the Weird (2012)

Artista: PARADOX

Álbum: TALES OF THE WEIRD

Estilo: Thrash/Speed Metal

Nota: 9,5/10

¿A quién no le ha dado alguna vez, por elaborar una lista con las bandas más infravaloradas de la historia del metal? Pues bien, en mi caso, cuando ocurre tal acontecimiento, los primeros de la lista son siempre, indefectiblemente, los germanos Paradox.  El resto de bandas que completan dicha lista, varían según la época  y el momento, Annihilator, Rage, Grip Inc, Tankard, o Testament, serían algunas de ellas. Pero es cierto, que en el ficticio y, hasta cierto punto, absurdo barómetro de calidad/reconocimiento, los que se llevan la palma son Charly Steinhauer y los suyos.

Bien es cierto que cuando ellos irrumpieron en la escena, la cantidad de bandas de gran nivel que practicaban un estilo similar, era espectacular, Artillery, Flotsam and Jetsam, Metal Church, Savatage, Angel Dust, la lista es interminable y llenita de calidad. Y claro, entre tanto bueno, o tenías algo especial, una esencia diferente, o solo te comías un cachito del pastel.

En mi modesta opinión, Paradox siempre tuvo un relativo talón de Aquiles, y es la voz de Charly, que si bien casaba con el estilo (ahora ya no sabríamos escuchar Paradox sin él), siempre anduvo falta de fuerza y carisma. Cumplía lo justo, no desentonaba, pero tampoco lograba ganar fieles. Voces más mediocres como la de James Hetfield o Dave Mustaine,  conseguían transmitir e hipnotizar mucho más que la de Steinhauer.

Quizás los continuos cambios de miembros en la banda, tampoco ayudaron mucho a consolidarlos en la escena. Si no me fallan las cuentas, en los seis discos de estudio hasta la fecha, han pasado por Paradox la friolera de doce bajistas, trece guitarras, seis baterías y cuatro vocalistas, ahí es nada.

Sea como fuere, Paradox nos regaló a finales de los ochenta dos discos de extraordinario nivel, “Product of Imagination” en 1987 y el tremendo “Heresy” en 1989. Después de ambas piezas de orfebrería, once años en el dique seco, hasta un nuevo larga durada en el 2000. Paradox volvía a la palestra con las señas de identidad habituales, un Thrash/Speed rebosante de calidad y personalidad. Todos, absolutamente todos los discos de Paradox hasta la fecha, son de un nivel altísimo, y su última entrega no iba a ser menos. 

“Tales of the Weird” mantiene el sonido característico de los germanos, pero con una producción que suena actual, muy meritoria, sonando auténticos y algo old school, y a la vez modernos. La portada también es digna de mención, posiblemente la más lograda de su carrera, dibujada por el Italo-Chileno Claudio Bergamin, que ya había trabajado con Paradox anteriormente, y que también ha trabajado para artistas de la talla de Halford o Arjen Anthony Lucassen (Mr L). En ella aparecen unos entes encapuchados, paseando por las ruinas de un paisaje apocalíptico, todo ello dibujado con muy buen gusto y oscuridad.

Otro hándicap más a tener en cuenta, es la incorporación en la banda para este disco (y ojalá para muchos más), del virtuoso guitarrista germano Christian Muenzner, conocido sobre todo por su trabajo en la banda de Technical Death, Obscura. Dicho fichaje ha sido, sin duda, todo un acierto. Muenzner ha sabido aportar su clase y particular estilo progresivo, de forma muy sutil, sin excesivo protagonismo, sabiendo respetar la esencia Paradox, y ayudando a mejorar el producto final.

Pues sumando todos estos factores, y viendo la impoluta carrera de Charly y los suyos hasta la fecha, la cosa no podía fallar. Y así ha sido, “Tales from the Weird” es posiblemente el mejor disco de los germanos hasta la fecha. Y si no el mejor, como mínimo el más completo. En los cincuenta y cinco minutos que dura el trabajo, no hay un solo segundo de relleno. El derroche de calidad y complejidad musical es tal, que por momentos se hace incluso insultante para el resto de los mortales.

El disco arranca espectacular, con el tema que da título al disco, “Tales from the Weird”. Unas guitarras acústicas, marca de la casa, seguidas de un medio tiempo épico, nos van metiendo en ambiente, hasta que hacia los dos minutos aparece el primer riff ultra-Thrash. Guantazo en la cara con la mano abierta, mientras con la otra te recogen para que no te caigas. Así es Paradox, te golpea duro, te deja medio grogui, pero no les interesa tumbarte en el primer asalto. Vas a tener que sudar, te vas a tragar toda su descarga, pues les ha costado mucho esfuerzo crear tal obra de arte, la vas a degustar, a padecer y disfrutar, y al final, te vas a alegrar de haber aguantado como un campeón, acabarás atropellado y chorreando sangre, pero enormemente satisfecho, palabra.

Con el segundo corte, “Day of Judgement”, deciden desempolvar su faceta más Speed/Power, un doble bombo cabalgante y un vertiginoso riff, nos recuerdan que en sus inicios fueron incluso comparados con los primero Helloween. “Brutalized” ya paga con el nombre, retoma su versión más potente, un ostión tremendo, thrash puro y duro, un parte cervicales continuo con su correcta dosis de melodía.

Frenamos un poquito el ritmo con “Fragile Alliance”, el medio tiempo de rigor de todos sus trabajos, el hecho de bajar de revoluciones no le resta calidad al producto, un tema pegadizo, donde se imponen las melodías vocales y las guitarras más heavys. Volvemos a la tralla burra con “Escalation”, un tema singular, pues combina una base Thrash muy old school, con momentos algo más progresivos, con especial atención al mega solo de Muenzner, totalmente impregnado de su esencia cósmico-progresiva.

“Brainwashed” se perfila como el segundo corte más completo del disco, después del primer tema. Un shred inicial alucinante, de los que te hacen llegar hasta el infinito, el bajón de velocidad en el estribillo, y el enésimo solazo de Muenzner, lo convierten en un temazo de altura.

La dinámica “Slashdead” nos recuerda mucho en su riff principal y estructura, al pegadizo tema de sus compatriotas Kreator, “Phobia”. Un corte que entra atravesado, con unas líneas de bajo tremendas. Y es que aquí, aunque la voz principal la llevan las guitarras, todos los músicos son de traca.

Nos acercamos al final con la relajante instrumental “Zeitgeist”, antesala del último trancazo del disco “The Downward Spiral”, tremebundo castañazo, toda una lección de cómo hacer Thrash virulento y agresivo de verdad, con unos solos de los que te parten en dos.

La guinda al pastel la pone la versión del tema de Rainbow “A Light in the Black”, ¡y menuda versión! El nivel instrumental es tremendo, las escalas imposibles de teclados y guitarras se suceden una tras otra, en una orgía musical de excelente buen gusto.

Paradox lo han vuelto a conseguir, un disco antológico que volverá a pasar relativamente desapercibido, y que no los colocará a la cabeza del Thrash/Speed mundial. Pero para los que lo disfrutamos de verdad, su valía es incalculable.

Aquí os dejo estas tres maravillas:

     

                                                                  

                                                                                                                              

Formación:

Charly Steinhauer: Vocals, guitars

Christian Muenzner: Guitars

Olly Keller: Bass

Daniel Buld: Drums

Temas:

1.	Tales of the Weird
2.	Day of Judgement
3.	Brutalized
4.	Fragile Alliance
5.	Escalation
6.	Brainwashed
7.	Slashdead
8.	Zeitgeist
9.	The Downward Spiral
10.	A Light in the Black (Rainbow cover)

MACHINE HEAD, F**king Head Live (2012)

Artista: MACHINE HEAD 

Álbum: F**KING HEAD LIVE

Estilo: Groove/Thrash metal

Nota: 9/10

 Con gran ilusión y expectación estaba yo esperando este directo de MACHINE HEAD, sobre todo teniendo en cuenta, que fui uno de los afortunados que pude disfrutar en directo de su tremebunda descarga, ofrecida el pasado año por nuestro país. Y el recuerdo que tengo de su actuación es imborrable, me parece que no exagero cuando digo que fue uno de los diez mejores shows de metal, a los que he asistido en mi vida, y os aseguro que no son pocos.

Lo primero de todo es felicitar a Flynn y los suyos, por haber escogido este preciso momento para grabar y publicar este directo. Es óbice, que todas las formaciones de metal, pasan a lo largo de su carrera, por diferentes estados anímicos y de forma. Y es de listos aprovechar tu mejor momento para editar un directo. MACHINE HEAD irrumpió en la escena de forma espectacular, su disco debut “Burn my Eyes” fue un mazazo totalmente inesperado, que dejó boquiabiertos a la parroquia metálica, en un momento en el que el Grunge lo invadía todo. Ellos junto a PANTERA se encargaron de demostrar a todo el mundo, que se podía hacer música ultra energética y violenta, sin necesidad de infinitos blast beat a toda pastilla.

Después de entrar en la escena por la puerta grande, la banda fue perdiendo fuelle conforme iban cayendo los discos, hasta tocar fondo con el infumable “Supercharger”. Pero a partir de ahí, comenzó la remontada. Ficharon al sensacional guitarrista Phil Demel, que ya había coincidido con Flynn en VIO-LENCE, y se sacaron de la manga  “Through the Ashes of Empires”, un buen disco que suponía una vuelta a las raíces, toda una declaración de intenciones. Y a partir de ahí, todo rodado, dos obras maestras seguidas de los californianos, el todopoderoso  “The Blackening” y el genial “Into the Locust”, el disco más heavy de la banda hasta el momento.

Y que mejor manera de celebrar dicho estado de forma que con este sensacional directo, una producción a la altura, con muy buen sonido pero sin exagerar en la nitidez,  haciendo notar que es un directo, que el público está ahí, rugiendo y sudando, coreando himnos, pasándoselo pipa. Puedo asegurar que cuando salí del concierto de Barna, todos, absolutamente todos los comentarios de los allí presentes, eran positivos. La satisfacción generalizada se mascaba en el ambiente.

El set list del disco funciona de forma gradual, seis canciones de su último trabajo, tres del penúltimo, una de todos los intermedios, y dos de su disco debut. Muy equilibrado, aunque a estas alturas, y puestos a pedir, yo hubiese eliminado “Bulldozer” y “The Blood, The Sweat, The Tears”, en beneficio de algún tema más del increíble “The Blackening”, y más teniendo en cuenta, que dichos temas ya estaban incluidos en el anterior directo de la banda “Hellalive”.

“Fucking Head Live” es una auténtica tormenta adrenalítica, todos los cortes poseen una potencia e intensidad al alcance de pocos, incluso las partes más melódicas de sus dos últimos, discos consiguen transmitir una energía arrolladora. Temas como “Darkness Whitin” o la cuestionada “Locust”, atruenan de lo lindo. Mención especial para esta última, pues fue uno de los cortes más vapuleados por la crítica especializada, y luego resulta que en directo la gente se hizo polvo con dicho tema, ¿quién era pues el que estaba equivocado?

MACHINE HEAD suele tener por costumbre comenzar los discos con un tema antológico, en la mayoría de ocasiones con el mejor corte del disco, y en directo la cosa no iba a ser diferente. Nada mejor para abrir el festival que “I Am Hell”, la breve intro, el “are you ready” de Flynn y a partir cabezas, menuda patada en la boca. Temazo de la cabeza a los pies, aun se me ponen los pelos como escarpias, cuando recuerdo el final con esas guitarras estiradas y las llamas saliendo de las pantallas gigantes directas hacia ti. Puede que la voz este algo floja en este primer corte, pero ya se sabe que en los primeros temas de un directo, es cuando el tipo de la tabla de mezclas, ajusta lo necesario.

De ahí en adelante todo rodado, los temas van cayendo como martillos castigadores uno tras otro, a destacar lo bien que suena “This Is the End”, quizás el tema de mayor complejidad técnica en la carrera de los californianos, y que aquí lo bordan, mención especial para Dave McClain en la batería, que está sencillamente soberbio. Y lo de Phil Demel en la guitarra… me quedo sin palabras, menudo hacha se buscó Flynn para su reconquista.

Cerramos el primer disco con la mítica “Old”, joyaza de su primer trabajo “Burn my Eyes”, un tema que te hace saltar sí o sí, total power, el Groove más energético posible en estado puro.

El segundo disco sigue por los mismos derroteros, “Darkness Within” pese a su inicio pausado, acaba reventándolo todo. La fiesta sigue y la triada final que nos tienen preparada es de traca. “Who We Are” con esos niños cantando en coro de inicio. La mastodóntica “Helo”, uno de los cortes más completos de su carrera, donde aparecen todas sus vertientes, Groove, Thrash, Heavy, de todo un poco. El solo mano a mano entre Flynn y Demel es de antología. También remarcable el  esfuerzo de Flynn subiendo agudos.

Y para rematar ending con “Davidian”, como no podía ser de otra manera. Su tema más emblemático hasta la fecha, el inicio de la leyenda, un corte que te parte en dos nada más comenzar, con esas chirriantes y afiladas guitarras, y los posteriores redobles de batería. Colofón a la altura, para un disco doble que nos muestra a unos MACHINE HEAD en estado de gracia. Una banda que siempre lo da todo, y con los cuales sabes que vas a salir vapuleado pero enormemente satisfecho.

Y aquí tenéis un breve cachito para que se os pongan los dientes largos, si os interesa os compráis u os descargáis el resto, según economía:

Formación:

Robb Flynn: Voz, guitarra

Phil Demel: Guitarra

Dave McClain: Batería

Adam Duce: Bajo

Temas:

Disc 1
1.	I Am Hell (Sonata in C#)
2.	Be Still and Know
3.	Imperium
4.	Beautiful Mourning
5.	The Blood, the Sweat, the Tears
6.	Locust
7.	This Is the End
8.	Aesthetics of Hate
9.	Old
Disc 2
1.	Darkness Within
2.	Bulldozer
3.	Ten Ton Hammer
4.	Who We Are
5.	Halo
6.	Davidian